Tumor hepático Mujer de 55 años, con hepatitis C, pérdida de peso de 10 kg en 4 meses, ALFAFETOPROTEINA DE 9.7. Nov 5, 2013 | Caso del día | 21 Comments « Tumores gástricos Tumor de partes blandas » Ana Karina Lorenzo Pontes says: January 29, 2014 at 12:08 am el carcinoma hepatocelular es la sexta neoplasia mas frecuente,y la tercera causa de muerte por cancer, se sabe que este cáncer se asocia con enfermedad hepatica , independientemente de la causa de la enfermedad, como por ejemplo, en este caso, existe el antecedente de hepatitis C , dentro de otros tambien se encuentran factores toxicos como el alcohol, y uno muy relevante, el sindrome metabolico. Dentro del cuadro clinico, tenemos conocimiento de que si el tumor es pequeño, es asintomatico, cabe señalar que siempre se llegan a encontrar sintomas de la enfermedad hepatica crónica previa; en casos más avanzados, se presenta dolor ,ascitis, aumento de ictericia, sangrado intraabdominal, y PÉRDIDA DE PESO SIN OTRA CAUSA APARENTE. Dentro del diagnostico por laboratorio es inespecifico suelen manifestarse signos de cirrosis, tambien se detectan cambios electroliticos, y en ciertos casos, alteración de enzimas como la Alfa fetoproteina. Otra ayuda en el diagnostico son las técnicas de imágen principalmente ultrasonido o ecografia y una TAC; la biopsia es asi mismo de utilidad diagnostica. En el tratamiento se incluyen resección hepática parcial, inyeccion percutanea de etanol, y quimioterapia. Itzel Guzman says: January 29, 2014 at 12:08 am Impresión diagnostica: Carcinoma Hepatocelular. A nivel mundial, el cáncer hepático ocupa el 6° lugar en incidencia y el 3° lugar en mortalidad, en Mexico (en 2010) ocupa el 3°lugar como causante de muerte, con una fatalidad del 99%. Como factores de riesgo se relaciona una edad avanzada, genero masculino, VHB, cirrosis hepática, alcoholismo,obesidad, antecedentes heredofamiliares Los niveles de alfafetoproteína son altos (Valor normal 0 – 5 UI/ml en hombres y mujeres no embarazadas), pero puede elevarse en condiciones no malignas como el embarazo, hepatitis viral y cirrosis. La alfafetoproteína (AFP, siglas en inglés) puede ser útil para diagnosticar y guiar el tratamiento contra el cáncer de hígado (carcinoma hepatocelular). Los niveles normales de AFP generalmente son menores a 10 ng/ml (nanogramos por mililitro; Los niveles de AFP son más elevados en la mayoría de los pacientes con cáncer de hígado. La AFP también es elevada en hepatitis aguda y crónica, pero rara vez es superior a 100 ng/ml en estas enfermedades. En alguien con un tumor en el hígado, un nivel de AFP mayor a cierta cantidad puede significar que la persona tiene cáncer. En personas sin problemas en el hígado, el valor es de 400 ng/ml. Sin embargo, una persona con hepatitis crónica a menudo presenta niveles elevados de AFP. Para estas personas, un nivel de AFP por encima de 4,000 ng/mL indica una señal de cáncer de hígado. La AFP también es útil para dar seguimiento de la repuesta al tratamiento contra el cáncer de hígado. Si el cáncer es extirpado completamente mediante cirugía, el nivel de AFP deberá bajar a niveles normales. Si el nivel vuelve a subir, a menudo indica que el cáncer ha regresado. Anayeli Peralta Osorio says: November 14, 2013 at 5:06 pm La hepatitis c como antecedente es importante ya que es causa d desarrollo de algun cambio en la forma del tejido macrocitico y microcitico. Es la 6% neoplasia en frecuencia a nivel mundial se trata de la 5ta enfermedad maligna en frecuencia en hombres y la 8va en mujeres, es la tercera causa d muerte por cance siguiendo al cancer de pulmón y gastrico. Su incidencia va n aumento sobretodo en lo q concierne a la propagacion de la infeccion de la hepatitis b. La infeccion por hepatitis b y c parecen ser las causas mas significativas ya q tienen 100 veces mas probabilidades d presentar riesgo relativo d desarrollar HCC. Los principales factores de riesgo son: infeccion cronica con los virus de hepatitis b o c, cirrosis alcohólica, esteatohepatitis no alcoholica, cirrosis. La AFP esta elevada al igual q la fosfatasa alcalina Impresión diagnostica Carcinoma hepatocelular (CHC) a determinar, de acuerdo a los datos dados como la elevación de la alfa feto proteína y el factor predisponente mas acentuado q es el virus de hepatitis c que como ya lo habia mencionado es un factor principal y tambien debido a los datos clinicos como anorexia y pérdida de peso Adaia Freyre says: November 14, 2013 at 4:49 am El virus de la heatitis C es una causa importante de hepatopatía en todo el mundo. En la literatura se habla de un virus RNA monocatenario encapsulado que codifica una poliproteína simple con un marco abierto de lectura que posteriormente es procesada para formar proteínas funcionales, esta estructura genómica tiene una parte de responsabilidad en la patogenia de la hepatitis C. En resumen, se necesitan de secuencias codificadas para la replicación asó como las propiedades de unión que este virus tiene con varias proteínas del anfitrión. La cirrosis consecuente puede desarrollarse a lo largo de 5-20 años después de la infección, los mecanismos que llevan a la cronicidad se desconocen. La cirrosis por si misma se refiere a la muerte de los hepatocitos, el depósito de matriz extracelular y la reorganización vascular, su mecanismo predominante es la proliferación de las células hepáticas estrelladas y su activación en células altamente fibrógenas y el mecanismo último puede ser el desarrollo de un carcinoma hepatocelular (3a causa de muerte mundial) Por lo tanto se trata del desarrollo de un carcinoma hepatocelular dependiente del VHC el cual, causa una inflamación crónica del hígado para que finalmente, como se menciona anteriormente eleva la progresión de cirrosis a cáncer. El hígado es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo, es nuestro “laboratorio” personal que mantiene a nuestro cuerpo limpio. El 20% de las personas que adquiere VHC evolucionará a cirrosis en los 20 años siguientes de haber contraído el virus. Por último, la mención de la alfafetoproteína es importante ya que como su nombre lo dice, debe estar presente en el feto y es normal. Se utiliza en el adulto como un marcador tumoral y según la ACS (American Cancer Society) puede elevar sus cifras en cáncer de hígado. Sus cifras normales en adultos es de 0-5UI/ml. Vany Fharahan says: November 13, 2013 at 8:49 pm El carcinoma hepatocelular es responsable de la mayoría de los cánceres del hígado. Este tipo de cáncer es más frecuente en los hombres que en las mujeres y generalmente se observa en personas de 50 años de edad o más. En la mayoría de los casos, la causa del cáncer hepático generalmente es la cicatrización del hígado (cirrosis). La cirrosis puede ser causada por: Consumo excesivo de alcohol (la causa más común en los Estados Unidos) Enfermedades autoinmunitarias del hígado Infección por el virus de la hepatitis B o C Inflamación prolongada (crónica) del hígado Sobrecarga de hierro en el cuerpo (hemocromatosis) SINTOMAS Sensibilidad o dolor abdominal, especialmente en el cuadrante superior derecho Tendencia al sangrado o a la formación de hematomas Agrandamiento del abdomen Coloración amarillenta de la piel o los ojos (ictericia) Diagnóstico: La demostración de una tumoración hepática >2 cm con intensificación arterial en 2 procedimientos de imagen o en una + aFP>400, es muy sugestivo de CHC. CONFIRMACION:Biopsia o PAAF guiada por Ecografía. El pronóstico usual es poco alentador, dado que sólo del 10 al 20% de los carcinomas hepatocelulares se pueden extirpar completamente con cirugía. Si el cáncer no se puede extirpar por completo, la enfermedad generalmente es mortal al cabo de 3 a 6 meses. Sin embargo, la supervivencia puede variar y, ocasionalmente, las personas sobreviven por mucho más de 6 meses. Hugo Estrada says: November 13, 2013 at 5:35 am Presuntivamente se trata de un carcinoma hepatocelular para el cual es necesario realizar una correcta estrategia terapéutica conforme a las bases y herramientas de diagnóstico etapificar correctamente el estadio del carcinoma con el fin de ejecutar el plan terapéutico óptimo para erradicar por completo o en la medida de lo posible para ofrecer una mejor calidad de vida al paciente. La estadificación correcta es esencial y para ello es necesario establecer varios parámetros: 1 La detección de nódulos adicionales aunado a la invasión vascular son determinantes para valorar la extensión del cáncer por vía hematógena, esto es indicativo de un estadio tumoral avanzado. El hallazgo característico que nos puede orientar para determinar la invasión tumoral vascular es un trombosis de aspecto expansivo, incluso puede presentarse hipervascularización arterial; esto es detestable mediante técnicas dinámicas como la TAC o la propia resonancia magnética, incluso permite distinguir ente vascularización de origen maligna o una trombosis por alguna otra causa. Cuando esto se dificulta puede apoyarse el diagnóstico con una biopsia del trombo tratando de buscar su origen maligno. 2. Una resonancia magnética es el estudio de gabinete de elección que permite encontrar lesiones adicionales incluso de pequeño tamaño con respecto a las lesiones halladas por medio de una TAC helicoidal que carece de la sensibilidad necesaria para hallar lesiones menores a 1 cm. 3. La invasión extrahepática sobre todo a pulmón y cuando se sospecha o se ha encaminado en diagnóstico de una etapa avanzada es necesario u obligatorio obtener una placa de tórax con el fin de descartar hallazgos metastásicos en cavidad torácica. 4. Las diseminaciones óseas, que si bien son menos frecuentes, pero siempre es obligación médica obtener todos los hallazgos posibles, se pueden descartar mediante una gammagrafía ósea, cabe señalar que este tipo de metástasis es sintomática con bastantes criterios clínicos que permiten sospechar en una invasión a hueso. Monserrat LM says: November 13, 2013 at 1:19 am En este caso clínico el diagnóstico más probable es Carcinoma Hepatocelular ya la paciente presenta factores de riesgo como son: edad avanzada (la edad media de aparición del carcinoma hepatocelular es de 63 años de edad) y el curso con hepatitis C, este último factor se ha encontrado altamente relacionado con el desarrollo de esta neoplasia. Los hallazgos que se puede observar en el estudio aquí presente es la hepatomegalia así como la tumoración apoyando a este diagnóstico, asimismo la frecuencia de este padecimiento resulta importante ya que ocupa el 6° lugar en incidencia y el 3° lugar en mortalidad a nivel mundial. Se conoce que los genes más frecuentemente involucrados son p53, PIKCA, B catenina. La presentación clínica suele ser asintomática hasta la presencia de enfermedad avanzada o signos y síntomas de enfermedad hepática subyacente. El nódulo hepático sospechoso debe estudiarse con US, CT, MRI, estudios de rutina así como alfafetoproteína la cual puede ser normal en el 80% de los pacientes con carcinoma hepatocelular y llegan a superar los 1000ng/ml en el 40% de los casos, asi entonces podemos ver como otra dato confirmatorio en este caso es el nivel de la alfafetoproteína de la paciente (9.7). Muchos de estos tumores tienden a metastatizar al hígado a través de la vena porta por lo que es necesario exámenes de extensión. El tratamiento de elección es la resección hepática cuando el tumor es < 5 y en ausencia de cirrosis. Estos pacientes pueden tolerar de forma adecuada resecciones de más del 50% del volumen total hepático, con una morbilidad y mortalidad cercanas al 2%. . La sobrevida de estos pacientes a 5 años es del 15%. Daniela Pablo says: November 12, 2013 at 1:53 am De acuerdo con los datos que nos proporciona dicho caso; pienso que se trata de un carcinoma hepatocelular. Es la sexta neoplasia en frecuencia a nivel mundial. Se trata de la quinta enfermedad maligna en frecuencia en hombres y la octava en mujeres. Es la tercera causa de muerte por cáncer, siguiendo al cáncer de pulmón y estómago. Interviniendo factores como: • Infecciosos: hepatitis B o C crónicas. • Nutricionales y tóxicos: alcohol, obesidad (hígado graso no alcohólico), aflatoxina, tabaco •Genéticos: tirosinosis, hemocromatosis (sobrecarga de hierro). • Inmunológicos: hepatitis crónica autoinmune activa, cirrosis biliar primaria. Para establecer el diagnóstico de CHC, alcanza con el hallazgo de los siguientes elementos combinados: Presentar un factor de riesgo como lo es la hepatitis C, aspecto clásico en una de las modalidades imagenológicas como se muestra en dicho caso a saber, una masa hepática de gran tamaño y/o masas hepáticas multifocales con hipervascularidad arterial, y aumento de los niveles séricos de AFP de (9.7), en un paciente portador de una enfermedad hepática crónica. Con presencia de síntomas (perdida de eso de 10 kg en 4 meses). Las opciones de tratamiento dependen en gran medida de la función hepática, del tamaño del tumor y de la presencia o ausencia de lesiones metastáticas o de invasión vascular. En la mayoría de los casos no son factibles los tratamientos curativos como la resección, la ablación por radiofrecuencia o el trasplante hepático, con lo que la intervención se limita al manejo paliativo. La mayoría de las opciones de tratamiento son caras y/o requieren centros especializados. La prevención primaria es muy importante para reducir el riesgo de CHC, mediante la vacunación contra la hepatitis viral (HVB). Any Cm says: November 9, 2013 at 4:11 am En el caso de esta paciente de acuerdo a los datos proporcionados (Hepatitis C, alfafetopreteína con niveles elevados así como la perdida de peso), podemos sospechar de una carcinoma hepatocelular. Este tipo de cáncer ocupa el 6to. lugar de incidencia a nivel mundial. Es más común hallarlo en hombres y generalmente en personas entre los 50 y los 60 años de edad. El carcinoma hepatocelular aparece frecuentemente en pacientes con hepatitis crónicas virales, ya sea de tipo B o C, en un 20% de los casos, o con cirrosis, en el 80% de los casos. En pacientes en los que se sospecha de este carcinoma muestran niveles elevados de alfafetoproteína, como en el caso de esta paciente. Uno de los mejores métodos diagnósticos sería la realización de un TAC abdominal con uso de un medio de contraste intravenoso. En la tomografía podemos observar tres patrones de crecimiento: un único tumor de gran tamaño, múltiples tumores o bien, un tumor poco definido con patrón de infiltración. Finalmente el tratamiento, podría consistir en la resección del tumor o bien un trasplante hepático, siempre y cuando el paciente sea candidato para ello. Antes de la cirugía, se debe determinar la extensión de la enfermedad, como está funcionando el hígado así como los antecedentes patológicos del paciente, asociados al órgano blanco. Ana Laura Camacho Morales (8HM4) Paola Monroy says: November 8, 2013 at 3:25 am DIAGNÓSTICO PRESUNTIVO: CARCINOMA HEPATOCELULAR Es el tumor hepático más frecuente en adultos, la incidencia está aumentando debido a un incremento de la cirrosis ocasionada por VHC y al alargamiento de la supervivencia, en el mundo occidental la mayoría de los casos de CHC (80-90%) se originan en un hígado cirrótico. La infección crónica por el VHC es la primera causa de cirrosis en nuestro medio, y estos pacientes representan la principal población de riesgo. Diagnóstico: La demostración de una tumoración hepática >2 cm con intensificación arterial en 2 procedimientos de imagen o en una + aFP>400, es muy sugestivo de CHC. CONFIRMACION:Biopsia o PAAF guiada por Ecografía. Carolina Márquez says: November 8, 2013 at 3:04 am Mi diagnóstico presuntivo de la paciente es un Carcinoma Hepatocelular (CHC). El CHC es la sexta neoplasia en frecuencia a nivel mundial. Se observa en personas mayores de 50 años de edad, sobretodo en hombres. El CHC se asocia a enfermedad hepática, independientemente de la causa específica de la enfermedad, pudiendo intervenir factores: infecciosos (hepatitis B o C crónicas), nutricionales y tóxicos (alcohol, obesidad), genéticos, deficiencia de α1-antitripsina, cirrosis por cualquier causa, etc. Los pacientes con CHC cursan frecuentemente con la siguiente sintomatología: dolor en el cuadrante superior derecho del abdomen, síntomas y signos de cirrosis subyacente, debilidad, distensión abdominal, síntomas gastrointestinales inespecíficos, ictericia, pérdida de apetito, pérdida de peso y anorexia. La radiología y/o la biopsia son herramientas diagnósticas definitivas. La determinación de alfafetoproteína (AFP) es una herramienta diagnóstica auxiliar. Los niveles persistentes de AFP superiores a 400 ng/mL o un aumento rápido del nivel sérico de AFP pueden ser útiles como criterios diagnósticos. Entre las opciones de tratamiento se incluyen: la resección hepática parcial, inyección percutánea de etanol o ablación por radiofrecuencia y la quimioembolización transarterial. Martínez Cuautle Carolina. 8HM4 Ais Argumosa says: November 7, 2013 at 4:19 am Mi diagnóstico presuntivo es un Carcinoma Hepatocelular, ya que el HCC ocupa la quinta neoplasia a nivel mundial. Para la mayoría de los pacientes es una complicación tardía de la cirrosis ocasionada por el virus de la hepatitis C (APP de gran importancia en los datos de la paciente). En estadios iniciales, el HCC frecuentemente es asin- tomático, lo que dificulta la detección temprana, por lo que generalmente el diagnóstico se realiza en etapas avanzadas de la enfermedad,3 cuando el tumor ya no es resecable y el pronóstico es malo a corto plazo. Con el fin de poder detectar la enfermedad en esta- dios más precoces y tratables, se han instaurado programas de detección La estrategia más utilizada es la determinación sérica de Alfafetoproteína (AFP) y realización de ultrasonido de hígado cada seis meses a los pacientes con cirrosis, con lo cual se ha incrementado la detección de tumores pequeños susceptibles de tratamientos potencialmente curativos o con impacto positivo en la sobreviva. Aunque AFP es un marcador útil para la detección de hepatocarcinoma, hasta en 40% de los casos, la AFP no está elevada. Posee una sensibilidad baja, de 39-64%, especificidad del 76-91% y un valor productivo positivo del 9-32%. Este marcador raramente se encuentra ele- vado en tumores pequeños, que son el objetivo de los programas de detección temprana. El tratamiento que sugeriría por la edad de la paciente y como los niveles de AFP están dentro de los rangos podría indicar que el tumor fuera menor de 5 cm y se podría hacer una resección hepática. Lupita Moreno says: November 7, 2013 at 2:07 am El presunto diagnóstico de esta paciente es un Carcinoma Hepatocelular (CHC). El Carcinoma Hepatocelular o Hepatocarcinoma es el cáncer más común del hígado a nivel mundial, generalmente se asocia con cirrosis y cursa asintomático en su etapa inicial. El CHC es la sexta neoplasia en frecuencia a nivel mundial. Se trata de la quinta enfermedad maligna en frecuencia en hombres y la octava en mujeres. Es la tercera causa de muerte por cáncer, siguiendo al cáncer de pulmón y estómago. (World Gastroenterology Organisation ©). El CHC es un ejemplo de las lesiones crónicas que se presentan en el tejido hepático. Del total de agentes químicos que ocasionan cáncer del hígado el más importante es el etanol, a través de cirrosis hepática o como co-carcinógeno con otros agentes HBV-HCV, hepatotoxinas y tabaco. Concuerdo con mis compañeras respecto a los signos y síntomas que presentan los pacientes que cursan con carcinoma hepatocelular. Para realizar el diagnóstico diferencial es necesario elaborar una historia clínica completa, realizar semiología adecuada y precisa en lo referente al padecimiento actual. son necesarios estudios de laboratotio que determinen condiciones funcionales hepáticas, marcadores tumorales (AFP, ACE), perfil de hepatitis viral y los estudios de imagen adecuados incluyendo arteriografía hepática en caso necesario. El carcinoma hepatocelular tipo estándar es más frecuente en el sexo masculino 8:1. La edad de presentación es por arriba de los 55 años, es un tumor invasivo, se acompaña de cirrosis hepática en el 90% de los caos, el nivel de AFP se encuentra elevado en el 80% y cursa con hepatitis viral en un 60%, en México se desconocen cifras exactas. María Guadalupe Moreno Velázquez. Adriana Diaz says: November 7, 2013 at 1:02 am Carcinoma Hepatocelular A nivel mundial el carcinoma hepatocelular tiene una incidencia anual de 500 000 a 1 000 000 de casos, y un número prácticamente igual de muertes. La paciente presentada en éste caso tiene uno de los factores de riesgo de esta patología: infección por VHC. Las alteraciones genéticas varían desde mutaciones puntuales, hasta pérdida o ganancia de brazos cromosómicos. Los pacientes con CHC presentan una o varias manifestaciones clínicas que incluyen dolor en el cuadrante superior derecho del abdomen, pérdida de peso, y descompensación de la función hepática evidenciada por alteración en enzimas hepáticas con cirrosis. Para realizar el diagnostico encontramos que se puede pedir la cuantificación de la alfa-fetoproteína como en el caso de la paciente que tiene un valor de 9.7ng/ml y que esta dentro del rango normal, pero se debe tener en cuenta que no en todos los tumores ésta se vera elevada, por ello para el dignostico oportuno se puede realizar un USG abdominal que tiene una sensibilidad > 60% y una especificidad > 90% y la biopsia hepática percutánea bajo guía radiológica tiene una sensibilidad y especificidad de 90% y 91% respectivamente para ultrasonido y de 92% y 98% para guía por tomografía respectivamente. Los tratamientos como la resección quirúrgica, el trasplante hepático y la ablación percutánea conllevan a una respuesta completa en una gran proporción de pacientes y mejoran de manera significativa la supervivencia. El tratamiento que to elegiría en éste caso y a reserva de tener más datos sería la resección quirúrgica ya que se puede obtener 70% de supervivencia a cinco años. Esperando que la paciente pudiera ser candidata a un transplante debido a que remueve el tumor y cura la enfermedad preneoplástica, ya que también tiene una supervivencia > 70% a cinco años y recurrencias < 15%. Libni Morán says: November 6, 2013 at 8:50 pm De acuerdo a lo reportado en la bibliografía el carcinoma hepatocelular es una complicación tardía de la hepatitis C crónica, es la forma más común de cáncer de hígado en adultos que usualmente se presenta después de 2 o 3 décadas de infección persistente y en pacientes con cirrosis previa. Muchos de los signos y síntomas de cáncer de hígado también pueden ser causados por otras afecciones, incluyendo otros problemas hepáticos, algunos de los síntomas más comunes son: Pérdida de peso, falta de apetito, sensación de llenura tras comer poco, náuseas o vómitos, fiebre, hepato y esplenomegalia. Los síntomas como fatiga, ascitis, ictericia y dolor en el hipocondrio derecho, aumentan su severidad. La alfafetoproteína (AFP) es una proteína que normalmente se encuentra en altos niveles en la sangre de los fetos, pero que desaparece poco después del nacimiento. Cuando se encuentra en la sangre de los adultos, sugiere que ellos pudieran tener cáncer de hígado o un tumor de células germinales de los testículos (en hombres) o de los ovarios (en las mujeres). La edad promedio en el momento del diagnóstico de cáncer de hígado es de 62 años. Más del 90% de las personas diagnosticadas con cáncer de hígado tienen más de 45 años de edad y a pesar de que la epidemiología nos dice que este cáncer es más frecuente en hombres que en mujeres, esta paciente reúne algunos criterios que sugieren carcinoma hepatocelular, sin embargo es necesario realizar más pruebas para confirmar u orientar el diagnóstico y dar el tratamiento adecuado correspondiente al diagnóstico. MORÁN RIVERA LIBNI JAEL 8HM4 Adriana Peña says: November 6, 2013 at 6:38 am Adriana Rodríguez Peña 8HM4 Adriana Peña says: November 6, 2013 at 6:25 am El carcinoma hepatocelular es el más común de los cánceres de hígado, se observa en personas mayores de 50 años de edad, sobretodo en hombres. En este caso la infección por el virus de la hepatitis C lleva a la cicatrización del hígado (cirrosis) y posteriormente al cáncer, aunque puede haber cáncer de hígado sin el antecedente de cirrosis. Algunos de los síntomas son: Sensibilidad o dolor abdominal, especialmente en el cuadrante superior derecho, tendencia al sangrado o a la formación de hematomas, agrandamiento del abdomen e ictericia. Por otra parte la pérdida de peso y caquexia, esto habla de un cáncer avanzado y se relaciona a fatiga, debilidad y pérdida de energía. Los niveles de alfafetoproteína son altos (Valor normal 0 – 5 UI/ml en hombres y mujeres no embarazadas), pero puede elevarse en condiciones no malignas como el embarazo, hepatitis viral y cirrosis; los pacientes con cáncer primario de hígado presentan aumento en niveles séricos mayores a 33 UI/ml, sin embargo en el 30% de los pacientes no presenta aumento en este marcador tumoral, además de que hay otros cánceres como el de páncreas (23 %), gástrico (18%), broncogénico (7%) y 5% de cólon que también modifican los niveles de AFP, por lo tanto no es muy específico. Mi conclusión es que es muy probable que sea un carcinoma hepatocelular debido a los antecedentes que se presentan, pero es necesario hacer otros estudios para confirmar el diagnóstico. Tam Kittypunx says: November 6, 2013 at 3:19 am Por los datos proporcionados es un carcinoma hepatocelular (HCC) que es el cáncer primario más común en el hígado (90%). En todo el mundo, el HCC ocupa el quinto lugar, así como el tercero como causa de muerte relacionada con cáncer. En pacientes con HCC de fase temprana se pueden curar mediante resección quirúrgica o trasplante de hígado, el HCC sin posibilidad de resección o metastásico posee un mal diagnóstico con una mediana de supervivencia de 6 a 8 meses. El diagnóstico tardío se da por la ausencia de síntomas patognomónicos y de la alta reserva funcional del hígado. El HCC se desarrolla habitualmente, pero no de manera exclusiva en un escenario de lesión celular hepática, lo cual conduce a inflamación, regeneración de los hepatocitos, remodelación de la matriz hepática, fibrosis, y por último a cirrosis. Las principales etiologías de cirrosis hepática son diversas e incluyen hepatitis B (HBV) y C (HCV que presenta la paciente) crónicas, consumo de alcohol, ciertos medicamentos o exposición a sustancias tóxicas, y enfermedades metabólicas genéticas. Más de 80% de los HCC se presentan en poblaciones infectadas por HBV en todo el mundo. La distribución geográfica de HCC se correlaciona con la prevalencia de HBV. Se debe realizar una exploración física buscando hepatomegalia, masa hepática, y otros signos de cirrosis. También se deben realizar las pruebas de función hepática, serología HBV/HCV, tiempo de protrombina,y fetoproteína alfa sérica (AFP). Para pacientes con cirrosis subyacente con infección crónica por HBV o HCV, el diagnóstico de HCC a menudo se sospecha con una elevación en el nivel sérico de AFP (con valores de >20 ng/ml que cuenta con una sensibilidad de aproximadamente 60% y una especificidad de 90%) o la aparición de una nueva lesión hepática en el ultrasonido. La AFP es el marcador más habitual en HCC y está elevada en aproximadamente 80% de pacientes con HCC. También se puede ver la elevación sérica de AFP en el embarazo, con tumores de origen gonadal, y en pacientes con infección crónica de HBV o HVC sin HCC. No todos los HCC secretan AFP, y se pueden ver concentraciones séricas de AFP normales hasta en 20% de ellos. La resección quirúrgica o trasplante hepático ortotópico (OLT) representan los únicos tratamientos curativos potenciales para HCC, asociados con prolongación significativa de la supervivencia. Por lo que sería el tratamiento más recomendable para la paciente. Ya que la quimioterapia no a probado ser efectiva en estos casos. Esto se da porque estos tumores expresan el gen de resistencia múltiple a fármacos MDR-1. Romero Bernal Tamara Sarah Alcantara says: November 6, 2013 at 2:35 am Diagnostico: Paciente con VHC, más probable hepatocarcinoma, El tratamiento ideal para el hepatocarcinoma es la cirugía, así pues es el tratamiento de elección es la hepatectomia permitiéndole al paciente una sobrevida mayor. Antes de resecar un tumor se debe determinar la extensión de la enfermedad (Tomografía Axial Computada, RX de tórax), la función hepática (Niveles de de bilirrubinas, transaminasas, proteínas totales, albúmina y globulinas) y si el paciente es o no cirrótico (se utiliza la clasificación de Couinaud para determinarla extensión de la cirugía). Lety Pop says: November 6, 2013 at 2:21 am el tratamiento es una resección hepática de los segmentos afectados. Lety Pop says: November 6, 2013 at 2:21 am es un hepatocarcionoma, debido a que la paciente presenta todos los signos propios de esta patología como son ictericia, ademas que el los laboratorios nos muestra u valor aumentado de la alfa fetoproteinuria, la cual se eleva en los canceres hepaticos